Generalidades – Instalaciones térmicas

Se entiende por instalaciones térmicas las instalaciones fijas de climatización (calefacción y refrigeración), de producción de agua caliente sanitaria (ACS) y de energías renovables, destinadas a atender la demanda de bienestar térmico e higiene de las personas.
En general, las instalaciones térmicas cuentan con los siguientes elementos:
  • Generadores térmicos: son los equipos generadores de frio y/o calor.
  • Sistema de distribución: es el conjunto de conductos, tuberías, bombas, difusores, radiadores etc., que distribuyen los fluidos (aire, agua, etc.) que transportan el calor o el frío en la vivienda.
  • Sistemas de regulación y control: permiten ajustar la instalación a las necesidades de confort.
Los generadores térmicos pueden ser de:
  • Calefacción: caldera, bomba de calor aire-agua, equipos eléctricos de resistencia.
  • Refrigeración: sistemas de compresión solo frío aire-aire.
  • Calefacción y refrigeración: bomba de calor aire-aire.
  • Producción de agua caliente sanitaria (ACS) y calefacción, en su caso (sistema mixto): caldera, bomba de calor aire-agua.
Las instalaciones térmicas deben cumplir unas exigencias con respecto al bienestar y la higiene:
  • Calidad térmica del ambiente: las instalaciones térmicas deben permitir que las condiciones ambientales se mantengan confortables para los usuarios de los edificios.
  • Higiene: la normativa establece la dotación de agua caliente sanitaria que las instalaciones térmicas deben proporcionar para la higiene de las personas.
  • Calidad del ambiente acústico: en condiciones normales de utilización, se limita el riesgo de molestias o enfermedades producidas por el ruido y las vibraciones de las instalaciones térmicas.
Las instalaciones térmicas se deben diseñar, ejecutar, utilizar y mantener para prevenir y reducir el riesgo de accidentes que supongan daños a las personas, los bienes o el medio ambiente.
La información detallada se encuentra en el apartado de «Ahorro de energía».