Para conseguir una cocina accesible para personas en sillas de ruedas existen diferentes soluciones en función de las necesidades de los usuarios y de las condiciones de partida del recinto. Como mínimo, para posibilitar su utilización por una persona en silla de ruedas se deben cumplir las condiciones siguientes:
En la cocina se dispondrá la encimera a una altura máxima de 85 cm y se dispondrá espacio libre bajo la cocina y el fregadero, que permita la aproximación de la silla de ruedas y el alcance y manipulación de los objetos cómodamente: como mínimo de altura igual a 70 cm; anchura, 80 cm y profundidad, 60 cm.